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Mi espíritu se destroza

De forma silenciosa.

Las palabras

Se me agotan

Sin haber salido

De mi boca.

El fetiche insistente

De ahogarse en ausencias,

Llama a la puerta…

Y me sumerjo en la nada

De la propia existencia.

¡Qué droga poderosa

Resulta ser la soledad!

La abstinencia constante

A todo lo humano

Me aleja de mí

Cada vez más…

Y sin pensar

Me dejo llevar

Por la fantasía

Del no ser yo

Jamás.

¿Qué será de mi

Cuando cese

La lluvia por fuera,

Y siga la tormenta

Por dentro?

¿Qué excusas

Pondré ante mis lágrimas?

¿Podré culpar a la humedad

De mis turbulencias?

¿Cómo responde uno

Ante los demás,

Si no es capaz

De responderse a sí mismo?

Ya no sé

Cuántas veces,

Mi yo de siete años

Lloró dentro de mí.

He aprendido

A colapsar con picardía,

Y reír.

Pero nada arde más

En el pecho

Que las lágrimas

De aquél niño

Que alguna vez fuimos

Y que no supimos

Defender.


Poco a poco

He perdido la inocencia,

¿Qué más da

Si pierdo también

La paciencia

O si voy por la vida

Con imprudencia?

He vociferado tarde

Y muy en vano,

Soy oídos aturdidos del pasado,

Ojos que han visto demasiado.

Ya no queda nada

Que perder,

Más que el aliento.



 

Autora del poema y la imagen: Mareco Milagros Belén


Mi nombre es Mareco Milagros Belén y soy de la Ciudad de Corrientes. En mi tiempo libre, además de escribir, me dedico al arte, tanto al dibujo como a la pintura y al oficio de la restauración de imágenes. Actualmente soy estudiante de Ciencias Criminalísticas y Criminología en la UNNE.


Instagram: mb.mareco_art

Mail: milybareco@gmail.com.

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