Ilustraciones y textos de Errante Clandestino
Llegaban momentos en que no le interesaba pertenecer, visitar ni asociarse a nada. Llegaban momentos en que solo precisaba de su propia presencia para sentir una cálida compañía. Una voz en off con su misma lengua, un árbol que lo saludaba, un pequeño viento que le daba la bienvenida a su infinita soledad.
Guardaba la pureza de lo intocable, los pensamientos más pervertidos y las ideas más absurdas para sí mismo. Por qué debería estar compartiendo su mundo todo el tiempo con el resto del mundo? Por qué habría de interesarle la opinión de los demás? Para qué sociabilizar constantemente en un planeta habitado por almas impenetrables a su propia verdad? Nadie se desnuda completamente en este mundo vestido. Nadie se expone hasta el infinito hasta quedar desprovisto de armas y escudos. Nadie durante tantos siglos de humanidad conoció realmente el profundo suelo del mar. Si al final somos astronautas flotando en la materia negra de la existencia, flechas volando inciertamente porque desconocen su propio rumbo, criaturas que madrugan cada día para acostarse al fin de la jornada sin sospechar cual es su verdadero destino.
Hare una lista con todas las cosas maravillosas que he visto en el mundo. Recordare que todo esta perdido pero no me cansare de seguir construyendo una solución. Pecaré, me arrepentiré y continuaré cometiendo los mismos dulces y sensuales pecados de siempre. Brindaré por todo lo que me hace mal y que disfruto. Escupiré sobre la tumba de mis dolores. Cometeré el delito de pedir perdón. Conduciré por la carretera del diablo hasta la cervecería mas económica del paraíso. Invocaré a las almas perdidas y las invitaré a jugar al ping pong. Reprobaré a mis maestros, le haré una multa a un policía y meteré en cana al hijo de un juez. Endeudaré al FMI y plantaré árboles frutales en cada boulevard de cada avenida del mundo. Votaré a cada travesti que se postule a la presidencia. Apagaré todas las velitas de cumpleaños, y les regalaré los deseos a quienes realmente necesiten vivir una realidad mejor.
Textos e imágenes de Mauri López