Vengarte
que me distraigan los fuegos artificiales y la música no da buena señal
en un marco teórico similar
estuve pensando que mejor ni calculo cuántos clicks te stalkeo en un día porque soy malo para las matemáticas,
eso me tranquiliza
con la única garantía de no volver a desear romperte el bocho y dejarte un halo de luz.
Creo en las palabras que dicta la piel,
por algo llegamos a ciertas charlas
Creo que no eras tan brutal como el mundo,
pensándolo a largo plazo
Si la lógica no alcanza, el mejor paso sería un beso para invitar otros sentidos.
Necesito desnudarte, que vengas arriba
me clavé el atuendo seductor
seamos héroes por un día
odio las vallas y los bastones largos
creo que tu barrio es medio amish
hago un poco de apología de las drogas
aunque lo único que deseo en verdad es dormir tranquilo.
Acabo de tener una revelación
ahora que volvieron las Bandana y fluye por mis venas un breve resabio de histeria noventera
espero que cuando leas este poema sepas
que no se trata de vos
sólo me levanté congestionado,
sin embargo escuché que estamos cerca de la revolución y ya sé en qué vereda estarás parado
esperame
preparate
te mataré con un pañuelo y poca clase.
Autor: Gonzalo Zuloaga
Gonzalo Zuloaga nació en La Plata el 18 de octubre de 1985. Ha publicado microrrelatos en la revista mejicana Monolito Arte y Literatura y fue acreedor de mención especial en el Iº Certamen Literario organizado por la revista digital Conurbana.cult. Escribe pastiches postmodernos y cut-ups en su página de Facebook, Kitsch disfrazado de cool.